jueves, julio 13, 2006

Tragedia


Este microcuento, me encantó (no sólo por el hecho de ser de Huidobro) si no que me hizo recordar mis mejores épocas duales. Si yo les contara.

¿Por qué no tuve un nombre compuesto?


Tragedia
(Vicente Huidobro)

María Olga es una mujer encantadora. Especialmente la parte que se llama Olga.
Se casó con un mocetón grande y fornido, un poco torpe, lleno de ideas honoríficas, reglamentadas como árboles de paseo.
Pero la parte que ella casó era su parte que se llamaba María. Su parte Olga permanecía soltera y luego tomó un amante que vivía en adoración ante sus ojos.
Ella no podía comprender que su marido se enfureciera y le reprochara infidelidad. María era fiel, perfectamente fiel. ¿Qué tenía él que meterse con Olga? Ella no comprendía que él no comprendiera. María cumplía con su deber, la parte Olga adoraba a su amante.
¿Era ella culpable de tener un nombre doble y de las consecuencias que esto puede traer consigo?
Así, cuando el marido cogió el revolver, ella abrió los ojos enormes, no asustados sino llenos de asombro, por no poder entender un gesto tan absurdo.
Pero sucedió que el marido se equivocó y mató a María, a la parte suya, en vez de matar a la otra. Olga continuó viviendo en brazos de su amante, y creo que aún sigue feliz, muy feliz, sintiendo sólo que es un poco zurda.

El Nanoviejito

4 Comments:

At 1:02 p. m., Blogger Unknown said...

¡Ayyy!... Viejito…

Esa es la triste realidad de muchas mujeres de antaño y de hoy. Creo que a veces el interés al dinero le gana al amor, con tristes consecuencias testificadas en la crónica roja. Bueno… al menos, de estas historias nutren los libros, los tangos y también nuestras fantasías.

Nano-micro-saludos.

 
At 3:32 p. m., Blogger Roxi said...

Buenísimo el cuento, que tentador y que peligroso tener nombres compuestos.
Claro que este no es tan nano, ni tan micro, como el anterior.
Pero muy muy bueno.
A mí de Huidobro me gusta uno de los primeros versos del Altazor:
"Y esa voz que te gritó vives y no te ves vivir"
A veces de la nada se me repite en la cabeza, igual que la musiquilla de la tirana, no sé por qué.
Ta ta ra ra ra rá. Ta ta ra ra ra rá. Tun, tun turún turún.
Saludos
Roxi microincoherente

 
At 7:15 a. m., Blogger FAHN said...

buen cuento,
espero ya no esté tan mojado.
suerte.

 
At 6:29 p. m., Blogger AngeLito said...

Que interesante esto de los nombres compuestos.
Buen post...

 

Publicar un comentario

<< Home