Comenzó el show de las comedias nuevamente

Mozalbetes pasados pa' la punta

Primero que todo, aún no me opero... la cuestión es en junio (eso sí, me pueden llamar antes si algún parroquiano tira el poto pa' las moras), pero hoy no quiero hablar de eso... (aunque gracias por sus buenos deseos).

Ayer prendí mi Bolocco, que se veía macanudo ya que le había limpiado recién el protector, ese verde tan lindo, que le da a la imagen un gracioso y deseable color "botella champañera" (ya me entró la sed) y me percaté que una vez más comenzamos con está payasada de la guerra de las comedias... yo ya estoy hasta la tusa... no hay respeto!!! Aunque, pa' serles franco como que me agarró una de ellas y comencé a verla, en realidad la vi toda la semana (para lorear nada más)... en la tardecita, sacaba el chalón color camello, me pelaba unos albaricoques y me sentaba en mi poltrona frente a la TV.

Hoy, lo único que espero, mientras escribo estas líneas es que llegue la tarde para verla... me pareció interesante el argumento de este chiquillo Alberto Moya Grau (aunque sus guiones se parecen, este esa como de misterio)... eso de que hubiese un asesinato y que culparan a la amiga de la víctima ... y que la metieran en la cárcel y por allá por yankeelandia, por 20 años, es terrible.... pobrecita de la buenamoza de Marcia (personaje que interpreta la macanuda Jael Unger)... y después que vuelva a Chile a hacerse pasar por la Madrastra de sus propios hijos (qué triste!) para poder descubrir al verdadero asesino, es una cuestión que me tiene los pelos de punta... y no me la pierdo hasta el útlimo capítulo...

Espero que ustedes cabros chicos estén viendo la misma, pa' poder comentar.


El veteclo (que se tuvo que poner cacaraco, porque hoy sintió frío).

Corazón maldito

Mozalbetes

La salud no me acompaña, el día miércoles pasado estaba jugando unas briscas con mi compadre Raúl "Pillo", el Guari y el guatón Luengo cuando de repente me vino un soponcio medio raro mientras me comía un pedazo de charqui. Como que me agité, así que me mandé sus buenos tintolios, los cuales me sacaron de la situación, yo me quedé callado, pero mis amigotes se dieron cuenta... no se cómo, quizás son muy astutos o fue el color blanco que adquirí por unos minutos, o por mi caída al suelo inconsciente, o por el cabezazo que me pegué en las tablas de la Sociedad Mutualista (donde nos encontrábamos... qué piso más duro), o quizás... quién sabe, la cuestión es que se me pasó la lesera, pero terminé al otro día yendo al matasano, que me derivó a otro matasano, y así... al final terminé en el "arregla bombo" (léase cardiólogo).

El médico, pa' variar era un mozalberte jugando a ser grande, me dijo que me tenía que hacer una serie de exámenes, así que me enchufaron a una cantidad indeterminada de máquinas donde vi mi corazón en la tele (como en las antiguas, las Westinghouse.... que lindas que eran, en esos tiempos eran todo un mueble con estilo, no un aparato como las de ahora, tenían unos diseños macanudos de madera con unos paños... bah!...parece que me fui pa' otro lado)... en resumidas cuentas tengo que operarme de la cuchara (léase corazón) en junio, pero si hay alguna vacante antes, será antes (ustedes saben como es la salud pública)... así que si de repente desaparezco, me estoy operando en el Hospital de Tórax en Santiago, espero que todo salga bien y que no me entre aire.

El viejito (cardiópata y asustado)